Buscador
Recent Sermons
Remedio para la codependencia
March 5, 2017Dios espera por usted
February 12, 2017Recibir de Dios
February 5, 2017La autoestima
January 29, 2017El ejercicio de la piedad
January 22, 2017
¿Cuál es el beneficio de negarse a sí mismo? Poder seguir a Cristo.
Nos negamos hasta donde ya nada de mí se niegue a seguir a Cristo, a obedecer sus palabras, a guardar sus mandamientos.
Nos negamos a ceder al pecado, la muerte y sus consecuencias.
Nada del Reino de Dios le parecerá funcionar hasta que acepte la muerte de quien era usted. El Reino tiene sus propias leyes (de vida), y tiene un Rey. No podemos vivir en un Reino, siguiendo leyes de otro reino. Esto es exactamente lo que un cristiano carnal está tratando de hacer. El “viejo yo” no puede ver, percibir, o captar las realidades del espíritu o del Reino de Dios porque no está sujeto a la ley de Dios (ley de vida), ni puede – Rom 8.7.
Morir a uno mismo es sobre todo la rendición de mi propia identidad con todos mis pensamientos y opiniones. Esto no es pretender estar muerto; es aceptar su muerte con Cristo (Col 3.3), algo que nunca puede ser experimentado sólo a nivel intelectual – Ga 3.20, no importa cuánto explique esto, la información no sirve para nada a menos que se experimente.
2 Co 5.17. “Todas son hechas nuevas” por lo tanto “todo es diferente”
Aunque todo ha sido hecho nuevo, no comprendemos que además significa que todo es diferente. Sólo podemos experimentar la realidad de Dios cuando por fe escogemos que sea nuestra propia y única realidad.
Dios no está diciendo, “Cierra los ojos y confía en mí.” Él está diciendo, “te voy a mostrar mi realidad. Si confías en mí puedes hacerla tuya”.
Ejemplos de la realidad de Dios y la realidad que percibimos:
Ex 3.5 “quita el calzado de tus pies, porque el lugar donde estás santo es” pero Moisés sólo veía la misma arena de siempre bajo sus pies.
Gn 15.5 “Lo llevó fuera, y le dijo: Ahora mira al cielo y cuenta las estrellas, si te es posible contarlas. Y le dijo: Así será tu descendencia.” Jehová le mostraba otra realidad – Rom 4:18-21.
2 R 6.14-18 Eliseo pide a Dios que los ojos de Giezi se abran a la realidad divina
Is 6.3. Isaías mirando circunstancias desesperantes y un futuro incierto por la muerte de un rey piadoso, Urías, tiene la visión celestial y escucha “Santo, Santo, Santo, es el Jehová de los ejércitos, toda la tierra está llena su gloria.”
Isaías esta es mi realidad: yo sigo siendo rey y mi gloria llena toda la tierra.
La realidad divina se hace nuestra cuando decidimos confiar en Dios tomando decisiones y acciones de acuerdo a Su realidad y no a la que vemos.
Jah mostró a Ezequiel cómo opera esa realidad: Ez 37.1-10.
Jesús le dice a Jairo, “la niña no ha muerto, cree solamente” – Mr 5.35,36.
Jesús dice de la muerte de Lázaro, sólo duerme, yo voy a despertarle – Jn 11.11-15, 39-40.
Ga 2.20 – quien usted era hasta ayer sin Cristo: murió.
Rom 12.2: La renovación de su mente es parte del proceso de persuadir su corazón con las razones y realidades de Dios. Pero todo comienza con esto: todo lo que yo era está muerto. Quien yo era antes murió.
De ninguna manera voy a rendirme a la falsa realidad que me muestra mi “viejo hombre”. No cederé a ningún recuerdo sin Cristo por placentero que parezca.
Como todo lo que yo era murió, entonces, todo lo que yo pensaba que era, está muerto ahora. Morí con Jesús. Esa persona fue crucificada con Cristo.
Reconozca esta verdad cada día y no tenga miedo al cambio.
Cuando usted se encuentre cediendo a patrones destructivos de su vieja vida, susurre o grite esta verdad:
Todo lo que yo pensaba que era, ya no existe más que en mi recuerdo. Morí con Cristo Jesús. Esa persona fue crucificada con Cristo cuando Él fue crucificado.
Háblele a la tentación, “Para ti yo estoy muerto, ya no tienes poder sobre mí.” (Rom 6.14) Entonces, escoja cómo quiere realmente responder a la circunstancia que enfrenta.
¡Ven y sígueme! – dice el Señor.
¿Te gustó? Compártelo.
Deje sus comentarios: